5 consejos para no pelear con la familia en Navidad
Se avecinan comidas, cenas y muchos momentos para pasar con nuestros seres queridos y aunque deberían ser citas felices, sabemos que pueden vivirse instantes de gran tensión
Ciudad de México, 24 de diciembre de 2024.- La Navidad es la época del año donde se producen reencuentros muy esperados y en la que compartiremos horas de comidas y cenas en las que, como es tradición, nos reuniremos con los seres queridos, pero en las que también puede haber tensiones, por lo que es importante seguir algunos consejos para no pelear con la familia.
Esas largas horas en la mesa pueden ser muy agradables por esos reencuentros o pueden resultar los momentos más tensos o tediosos del año. El doctor Leonard Felder, un psicólogo de Los Ángeles, descubrió que al menos tres cuartas partes de nosotros tenemos un miembro de la familia que nos molesta. Pero ¿cómo no pelear con la familia en Navidad si es precisamente cuando tienes que estar sí o sí con esa persona?
Cuando llegan estas fechas, intentamos evitar el conflicto para no chocar con esos miembros de la familia con los que no nos entendemos, con los que las diferencias ideológicas y religiosas son brutales y con los que se mantienen heridas sin curar.
Pero hay que entender que el enfado y el conflicto es algo que forma parte de las relaciones más estrechas. Así que si nos resistimos a un poco de tensión saludable lo más probable es que acabemos manteniendo relaciones poco maduras con ese miembro de la familia con el que nos llevamos mal.
¿Por qué discutimos con la familia en Navidad?
Hay varias teorías que explican por qué suceden estas peleas familiares. Una de ellas ha sido desarrollada por Sigmund Freud, y la bautizó como ‘el narcisismo de las pequeñas cosas’: es decir, que personas que se parecen mucho entre sí se obcecan con resaltar justo las pequeñas cosas que les separan.
Otra causa que han detectado los psicólogos son los llamados ‘alérgenos sociales’: “cosas pequeñas que al principio no provocan una gran reacción, pero que pueden provocar explosiones emocionales con una exposición repetida”, explican Joe Palca y Flora Lichtman en ‘Annoying: The Science of What Bugs Us’. Es el caso del familiar que un año cuenta una anécdota y resulta divertida, pero que luego año tras año la vuelve a contar y entonces resulta mal hasta que alguien explota y se monta el cirio.
Otra explicación psicológica viene de las personalidades pasivas-agresivas, esas que evitan poner la mesa “por no meterse en líos” o seguir los consejos de los padres “porque son indeseados”. Al resto de los invitados acaba resultando un comportamiento muy enojoso.
Y luego, hay una teoría más que señala que las rivalidades entre hermanos no se detienen en la infancia: el conflicto y la rivalidad prosigue aunque ya no vivan juntos. Los psicólogos encontraron más tensiones entre los hermanos que eran cercanos en edad y del mismo sexo.
¿Qué podemos hacer para lograr empezar 2024 con la fiesta en paz? Pues seguir estos 12 consejos para no pelear con la familia en Navidad.
1- No te crees falsas ilusiones
No pienses que va a ser una cena de película, unas Navidades perfectas y que todo va a ser maravilloso. Las perfecciones solo provocan estrés para todos así que baja las expectativas y deja que suceda lo que tenga que suceder, con naturalidad.
2- Céntrate en la ocasión
Los regalos que vamos a abrir en unas horas, si nos hemos gastado mucho o poco, etc, hemos pasado varios días olvidando el sentido de la Navidad. Sí, esto puede sonar un poco cursi, pero puede ayudar a evitar las peleas si nos centramos en el sentido de la fiesta que estamos viviendo, en la oportunidad de estar juntos y en maximizar la importancia de las vacaciones en sí.
3- Aceptación
El tercer consejo para no pelear con la familia en Navidad es simple: asúmelo, no nos queda otra que aceptar. Si tu padre se trae a su nueva novia o tu hermano aparece con una pareja que te resulta insoportable no es necesario hacerlo notar en la hora de la cena. Declara la mesa libre de dramas durante un tiempo, practica la aceptación.
4- Cuidado con el alcohol
Que si una cerveza de aperitivo, que si luego los vinos con la comida, que el brindis por juntarnos toda la familia, que venga las copas al final en la sobremesa. Es un consejo para no pelear con la familia complicado en estas fiestas, pero intenta no beber más de la cuenta, porque con el alcohol todo se calienta y se dicen cosas que no se quieren. Mejor optar por la moderación.
5- Declara una tregua
¿Hay un problema familiar vigente? Pues no es el momento de sacarlo en la comida o la cena. Evítalo o, mejor aún, intenta resolverlo antes de juntarlo todos. ¿Por qué no perdonar de una vez eso que nos molesta desde hace años? Quizás el mejor regalo de Navidad es solucionarlo, si es posible.
6- Los niños
Los más pequeños de la casa tienen derecho a vivir al máximo la Navidad que, a fin de cuentas, son los que disfrutan la fiesta con más intensidad e ilusión. Céntrate en ellos, ponles en lugares estratégicos separando a las personas entre las que pueda haber más enfrentamientos e intenta guardar las malas lenguas.
7- Tu mejor amigo
Y hablando de escudos humanos… si las cosas están realmente complicadas y tienes un amigo que te debe un gran favor, ¿por qué no le invitas a cenar? Obligará a que el resto se comporten lo mejor posible, aunque sea por aparentar.
8- Cantar juntos
Quizá te parecerá una idea estúpida y seguro que el grinch de la familia reniega de ello, pero quien canta su mal espanta: si empiezas a cantar villancicos o si pones el karaoke, o repasas los éxitos del año, seguro reirás y desaparecerán los malos temas. Lo que no consiga la música…
9- Los temas que debemos evitar
Es un clásico, pero conviene tenerlo en cuenta. Nos sentamos a la mesa sabiendo que no se debería hablar de ciertos temas ‘delicados’, como la religión, el sexo, la política, el ejército, los equipos de fútbol. Lo que podría ser un interesante tema de conversación puede acabarse convirtiendo en una auténtica bomba de relojería. También evita hablar de temas laborales, se trata de desconectar del trabajo un poco esa noche.
10- Reír
La música tiene efectos extraordinarios y también lo tiene el humor. Y no nos referimos al chiste malo del cuñado o a la broma reiterada año tras año de tu tío, sino a que si ya la situación tensa llegó, intenta resolverla con buen humor, intentándole poner una sonrisa y separando a ambas partes con la mejor de tus caras (y de tus risas si es necesario).
11- Ante personas tóxicas: el arte del contacto cero
Ya no es que no sea “santo de tu devoción”, es que ¿es una persona tóxica para ti? Entre otras claves, Silvia Congost, psicóloga especializada en autoestima, relaciones y dependencia emocional, nos recomienda el contacto cero. “Céntrate en que lo mejor es hacer ‘contacto cero’, aunque esté en la misma habitación, es decir, no hacerle caso ni tomarte nada de lo que diga o haga como personal. No se trata de que si te pregunta algo no le respondas o mires hacia el otro lado, pero sí de que intentes mantener distancia a todos niveles”, apunta la experta.
12- Ser consciente de lo que tienes
Nos volvemos a poner cursis para cerrar estos consejos para no pelear con la familia en Navidad, para recordar la suerte que tenemos de la familia que nos rodea, así que… ¿para qué pelear? ¿Por qué aprovechar los únicos días en los que cenamos juntos y nos reencontramos en discutir? Es absurdo. Mucha gente pasará estas noches sola y debemos ser consciente del abrigo que nos proporciona nuestra familia (aunque no siempre sea perfecta).