Acapulco pierde zonas de playa debido al calentamiento global: advierte oceanólogo
Barnard llamó a las comunidades costeras y empresarios turísticos a adoptar medidas de adaptación, como evitar construcciones cerca del litoral
Acapulco, Gro., 16 de diciembre del 2024.- El calentamiento global y el cambio climático continúan cobrando factura en las costas mexicanas, y Acapulco no es la excepción. Según el oceanólogo Juan Manuel Barnard Ávila, el aumento del nivel del mar y fenómenos como el mar de fondo están provocando la pérdida progresiva de zonas de playa en el puerto, afectando tanto a los ecosistemas como a las actividades económicas locales.
Revolcadero, un caso emblemático
Uno de los ejemplos más visibles es la playa Revolcadero, donde el mar ha ganado terreno de manera significativa, dejando a los bañistas y prestadores turísticos sin espacio suficiente para colocar mobiliario.
“Se tienen que adaptar a los cambios climáticos que se están viviendo. Es muy bonito vivir junto al mar y lo que le diría a todos los concesionarios, es no construyan en esos lugares, al menos de que se recorran al menos 10 metros y construyan sobre pilotes, porque es un tsunami que se nos está viniendo encima”, explicó Barnard en entrevista con El Sur de Acapulco.
Factores que agravan la situación
En un foro organizado por la asociación Guerrero es Primero, Barnard señaló que el calentamiento global está impulsando fenómenos naturales más extremos. Entre ellos, destacó el aumento de la temperatura en el mar, que contribuye al fortalecimiento de fenómenos meteorológicos como huracanes.
Un ejemplo reciente fue el huracán Otis, que evolucionó rápidamente en intensidad debido a las temperaturas de 32 grados Celsius registradas en el agua frente a las costas de Guerrero. Este incremento de temperatura, combinado con otros factores como la expansión térmica del agua y la inclinación de las playas, agrava el impacto de las mareas vivas y fenómenos de mar de fondo.
La urgencia de adaptarse
Barnard llamó a las comunidades costeras y empresarios turísticos a adoptar medidas de adaptación, como evitar construcciones cerca del litoral y considerar estructuras elevadas sobre pilotes para mitigar los riesgos. “El calentamiento global es un tsunami silencioso que ya está afectando nuestras costas”, advirtió.
Mientras tanto, el puerto de Acapulco enfrenta el reto de equilibrar su desarrollo turístico con la preservación de sus playas y ecosistemas, que no solo son fundamentales para la economía local, sino también para el bienestar de sus habitantes y la biodiversidad marina.