Lidia toca tierra en Jalisco
Afectará Nayarit, la parte sur de Sinaloa y porciones costeras de Jalisco,
Acapulco, Guerrero, 10 de octubre 2023.- El huracán Lidia tocó tierra en la región de Tomatlán Jalisco, aunque aún se mantienen en categoría 4, así lo informaron la Comisión Nacional de Agua y el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos.
Con el toque de tierra de este fenómeno se producirán precipitaciones en Nayarit, la parte sur de Sinaloa y porciones costeras de Jalisco, a consecuencia de esto es posible que existan inundaciones urbanas y repentinas, además de deslizamientos de tierra en zonas de terreno más alto cerca de la costa.
¿Qué significa que un Huracán toque tierra?
Cuando se dice que un huracán “toca tierra,” se está haciendo referencia al momento en que el ojo del huracán, o el centro de la tormenta, cruza sobre un área terrestre en lugar de estar sobre el océano. En otras palabras, el huracán se mueve desde su posición sobre el agua hacia una región de tierra firme, una isla o una costa.
Cuando un huracán toca tierra, puede tener varios efectos significativos:
Vientos fuertes: A medida que el ojo del huracán cruza la costa, los vientos pueden ser extremadamente fuertes y destructivos. Estos vientos pueden derribar árboles, dañar edificios, arrancar techos y causar daños generalizados en la infraestructura.
Lluvias intensas: Los huracanes también traen consigo lluvias intensas que pueden provocar inundaciones, especialmente si el huracán se mueve lentamente o se estanca sobre una región. Las inundaciones pueden ser repentinas y potencialmente mortales.
Marejadas ciclónicas: Cuando un huracán toca tierra, puede generar una marejada ciclónica, que es un aumento súbito y peligroso del nivel del mar en la costa. Esto puede resultar en inundaciones costeras extremadamente destructivas.
Tormentas de tornados: En ocasiones, los huracanes también generan tornados, que son vórtices de viento extremadamente peligrosos. Estos tornados pueden causar daños adicionales a medida que el huracán toca tierra.
Es importante destacar que el momento en que un huracán toca tierra es crítico para la evaluación de su impacto, ya que es cuando la población en tierra está más expuesta a los efectos más devastadores de la tormenta.