Friedenreich, el rey del fútbol antes de Pelé
Conocido como el primer superastro del fútbol brasileño, logró hazañas que ni siquiera Pelé logró superar
Ciudad de México, 29 de diciembre de 2022.- Arthur Friedenreich fue un futbolista brasileño que jugó a principios del siglo XX. Nació en 1892 y se convirtió en uno de los jugadores más famosos y respetados de su época.
Friedenreich es conocido como el primer superastro del fútbol brasileño y es considerado uno de los primeros futbolistas de élite de América.
Jugó en una época en la que a los negros no se les permitía jugar al fútbol; en ese entonces, el deporte era dominio de la clase alta blanca.
A él se le permitió jugar porque tenía rasgos blancos; como mulato parecía bronceado, además tenía los ojos verdes.
Sin embargo, tenía que alisarse el pelo antes de cada partido, y a menudo tardaba horas para conseguir el look adecuado.
Desafortunadamente, no era una práctica infrecuente en Brasil en esos años; de hecho, se cuenta que Carlos Alberto, leyenda del Fluminense, se blanqueaba la cara con harina o polvo de arroz antes de los partidos.
Al haber crecido en una familia de estilo europeo, Friedenreich tuvo contacto con el fútbol desde muy pequeño. En ese entonces, la mayoría de los brasileños eran demasiado pobres para jugar, ya que la afiliación a los clubes estaba restringida.
Pero Friedenreich apareció por primera vez en los libros de récords en 1909 jugando acertadamente para el Germania, un equipo formado por inmigrantes alemanes.
Con sólo 17 años, Friedenreich se ganó muchos admiradores con su habilidad, velocidad, potencia, regate y técnica. No tardaron en llegarle ofertas.
Durante las cuatro temporadas siguientes jugó en cuatro clubes diferentes, progresando constantemente en cada uno de ellos hasta que en 1912 se proclamó máximo goleador de la Liga de Sao Paulo con 16 goles.
Volvería a serlo en 1914, 1917, 1918, 1919, 1921, 1927 y 1929. Hasta la fecha, nadie ha igualado la hazaña de ser máximo goleador de la liga tantas veces, ni siquiera Pelé.
Se calcula que pudo anotar unos mil 329 goles en mil 239 encuentros, logrando así una hazaña increíble: promediar más de un gol por partido, algo que sólo dos jugadores de Sudamérica han logrado: Bernabé Ferreyra y Valeriano López.
Pero Friedenreich no sólo era un jugador especial por su asombrosa capacidad goleadora. Estaba dotado de una habilidad fabulosa y de una tenacidad a la altura.
Medía un metro y setenta centímetros, y los futbolistas uruguayos y argentinos le apodaban “El Tigre” por su actitud de no rendirse nunca.
A lo largo de su carrera, Friedenreich jugó para varios equipos en Brasil y en Europa, y también fue seleccionado para representar a la selección nacional de Brasil en varias ocasiones.
Aunque su carrera fue breve, Friedenreich dejó una huella duradera en el fútbol y es recordado como uno de los mejores futbolistas de la historia.