Choque de opiniones entre legisladores y periodistas en el foro ‘Ser periodista sin morir en el intento’
En los gobiernos priistas y perredistas más atentados contra comunicadores y defensores de derechos humanos Buscan crear un sistema que evite eludir responsabilidades a los tres niveles de gobierno Por VERÓNICA CASTREJÓN ROMÁN/ Fotografías: Verónica Castrejón Acapulco, a 26 de marzo de 2022.- Raspados, por decir lo menos, reconvenidos y reflexivos por decir lo más, […]
En los gobiernos priistas y perredistas más atentados contra comunicadores y defensores de derechos humanos
Buscan crear un sistema que evite eludir responsabilidades a los tres niveles de gobierno
Por VERÓNICA CASTREJÓN ROMÁN/ Fotografías: Verónica Castrejón
Acapulco, a 26 de marzo de 2022.- Raspados, por decir lo menos, reconvenidos y reflexivos por decir lo más, se fueron los diputados del Grupo Parlamentario del PRD que, convocados por el ala “Nueva Izquierda Guerrero” de ese partido, presidieron en Acapulco el foro nacional al que invitaron a participar a periodistas guerrerenses para discutir el tema “Ser periodista sin morir en el intento”.
Los legisladores del Partido de la Revolución Democrática presentaron a los comunicadores su iniciativa de una Ley General de Protección a las Personas Defensoras de Derechos Humanos y Periodistas que pretende dar margen a la creación de un Sistema Nacional, mediante la modificación de los Artículos 6 y 73 constitucionales que contribuirá además, a la creación de un marco jurídico que responsabilizará, en la protección de los periodistas, a los tres estratos de gobierno.
Para sensibilizar, ante un auditorio de poco más de medio centenar de periodistas, se inició con un minuto de silencio, mientras al fondo, en la pantalla circulaban los nombres de periodistas asesinados.
Después, la bienvenida al evento organizado por “un partido que ha enarbolado las causas de todos” y la advertencia de que el objetivo es conseguir “la opinión y ayuda de actores políticos para buscar a través del abrazo y caminar juntos, que nadie sea tocado; nadie más sea incluido en esa lista”, más la intención, “que sea el PRD el que enarbole esta causa”: Tomás Hernández Palma, presidente municipal de San Marcos.
Y empezaron a entrar en materia. La coordinadora nacional de Nueva Izquierda, Verónica Juárez Piña acusó que desde Palacio Nacional “se hacen declaraciones indignantes que han trascendido las naciones al minimizar a las instituciones llamadas a proteger los derechos humanos”; por eso, dijo, la corriente Nueva Izquierda del PRD impulsa esa ley y reiteró su respaldo a los periodistas y a los defensores de los derechos humanos, “para poder seguir gozando de la democracia”.
E invitó a los periodistas a participar, “que las decisiones importantes del país se tomen con los que están directamente interesados”.
Y sí, más adelante los periodistas ¡vaya que participaron!
Enseguida, Gabriela Sodi, quien preside la Comisión de Grupos Vulnerables en la Cámara de Diputados, explicó que su pretendida ley, tiene el fin también de crear un instituto nacional autónomo y de gestión cuya dirección recaería en un Consejo Ciudadano, “para garantizar la integridad, los derechos humanos y la libertad de expresión”.
Sostuvo luego que desde enero de 2018 a la fecha, la violencia va en aumento y que la UNESCO tiene catalogado a México como el país más mortal para los periodistas. Habló de que la libertad de prensa es vital para la libertad de expresión “y toda la democracia y se requiere de medios libres de censura y del control estatal”.
La diputada acateca Fabiola Rafael Dircio afirmó que la libertad de expresión y el derecho a la información en este gobierno han sido unos de los derechos más vulnerados en México, debido a vacíos legales para la protección de los y las periodistas, ya que la búsqueda de la verdad, como su oficio, se ha convertido en una profesión de alto riesgo, por lo que los informadores “deben ser protegidos, tanto de la delincuencia y en muchas ocasiones, de las propias autoridades”.
Denunció por último que no hay estadísticas de mujeres periodistas indígenas víctimas de la violencia.
Al término de su intervención, como preludio de lo que se venía, uno de los moderadores del foro, el periodista Jorge Nava, director del portal digital Costa Brava, se deslindó de la postura de las legisladoras y recalcó que su presencia ahí obedecía a la invitación que le hiciera la otra moderadora, la periodista Guadalupe Guzmán Rentería, solo como moderador.
Cuando llegó el turno al diputado federal Marcelino Castañeda Navarrete lamentó que México sea el país más peligroso para ejercer el periodismo sin que el país se encuentre en guerra. Acusó que “la postura del actual gobierno es insensible y minimiza estos arteros crímenes” y refirió que este año ya van ocho periodistas asesinados y que varios perdieron el mecanismo de protección.
Y otra vez ofreció la plataforma: “El PRD siempre se ha comprometido en legislar en torno de los periodistas y la libertad de expresión; no están solos”.
Y por último, en el tramo de la participación de los legisladores, la diputada Elizabeth Pérez Valdez, afirmó primero que “históricamente el PRD ha participado en las luchas sociales y hace suyas las causas de la gente”; después, fustigó: “tiranos y dictadores como el que hoy tenemos en Palacio Nacional, los brazos no le han alcanzado para tapar la corrupción que lo desborda” y terminó diciendo que el proyecto de su iniciativa de ley, “es una deuda histórica que tenemos con ustedes; ser periodista no debe significar nunca morir en el intento”.
Los periodistas participan
A ojos vistas (y desde lejos) el director del portal y programa radiofónico “Al Tanto Guerrero”, Misael Habana de los Santos, temblaba de indignación cuando lo llamaron al micrófono, pues dijo sentir que era pretendido objeto de manipulación ante la presentación de una iniciativa de ley que ya se presentó a la Cámara de Diputados; “¿o qué, le van a poner un bis con nuestras opiniones”, reclamó.
Después, con voz más mesurada agregó: “Esto no parece un foro de periodistas, sino la reunión central del PRD”.
Recalcó que no tiene militancia partidista pero sí preferencias políticas; saludó y felicitó a la iniciativa en su espíritu, pero enseguida comentó:
“Comparto el objetivo de cualquier iniciativa que busque proteger a periodistas y defensores de derechos humanos. Y a la sociedad en general”.
Pero, “lo que no comparto”, dijo, volteando a ver hacia atrás a los legisladores sentados sobre las sillas colocadas en semicírculo sobre una superficie roja y desplazable, “son las razones que pretenden justificar la misma, como responsabilizar al actual gobierno federal de la situación de violencia que viven los periodistas y defensores de derechos humanos en el país”.
Misael Habana les dijo, así, casi de frente, que de acuerdo con las cifras oficiales, los 56 periodistas asesinados en estos últimos tres años de gobierno, tienen un eje común que llama la atención, “y es que el Estado no ha tenido que ver en ellos como cuando gobernaron el PRI, el PAN o el PRD en el gobierno federal y en el estado de Guerrero”.
Recalcó que “violencia en contra de los auténticos profesionales de la información se debe a la corrupción y a la delincuencia, esta última vinculada por muchos años al Estado y protegida por los políticos y sus partidos que nos han gobernado”.
Y recordó enseguida que “las matanzas, persecución y ejecuciones de periodistas y luchadores sociales en Guerrero se dieron en gobiernos del PRI y el PRD” y que en todas ellas participaron organismos y fuerzas del Estado sobre las que no se ha hecho justicia porque las investigaciones respectivas siguen inconclusas.
Habana de los Santos calificó a la iniciativa “buena en su espíritu, pero perversa en sus obvios fines políticos”, como llamar omiso y centralista al gobierno federal en lo que se refiere a la protección de los periodistas.
Les advirtió que en su forma, la iniciativa de ley restará posibles alianzas para su aprobación, pues dijo que no solo se busca ayudar a los comunicadores, “sino –espero estar equivocado- sacar raja y provecho político partidista y golpear el gobierno de Andrés Manuel Lopez Obrador.
A continuación les lanzó: “Señores políticos ¿no se podría sacar adelante un proyecto de beneficio para determinado sector social sin ver el beneficio propio o partidista?”.
Roberto Ramírez Bravo, director del portal digital La Plaza coincidió con Misael Habana en que la iniciativa de ley del PRD, en su forma, parece que solo pretende golpear el presidente, López Obrador y responsabilizarlo de los asesinatos de los periodistas.
Les dio cifras: En el mandato del panista Felipe Calderón, fueron asesinados 143 periodistas; en el del priista Peña Nieto, 96, y en lo que va del actual gobierno federal. AMLO reporta 53, mientras que Artículo 19 solo contabiliza 35.
Después los aleccionó: “Este problema viene desde antes y tiene que ver con el tema de la impunidad. Les advirtió que difícilmente lograrán la aprobación de su iniciativa de ley porque tendrán que buscar consensos y como está redactada, no los conseguirán”.
“Hablan, les dirigió, de una libertad de expresión acotada más en este gobierno, y no es así. El hecho de que hay un payaso que ofende al presidente lo demuestra”, les reviró Ramírez Bravo, en clara referencia a Brozo.
Y los desmintió: No hay indicios de que los asesinatos de los periodistas provengan de este gobierno, como sí los hubo en otros gobiernos en cuyos mandatos; todos en completa impunidad, “en el caso de Amado Ramírez solo hubo detenidos, sin investigación”.
Agregó que en el segundo período del gobernador Ángel Aguirre Rivero, hubo 4 periodistas asesinados, un desaparecido y 3 desplazados; “tampoco hubo investigación”, les recalcó, para continuar enseguida: “con Héctor Astudillo hubo 8 periodistas asesinados y ninguna investigación; ¿de qué sirve entonces un mecanismo de protección que no protege?”, los cuestionó.
“Los periodistas no acuden a esa instancia porque no le tiene confianza; sus fondos se han ido al fondo de la corrupción. No solo hay que pensar en la seguridad y la protección de los periodistas, sino también en la impunidad, hay que ligar los casos a su actividad, pero no hay investigación”, les dejó para la reflexión, Roberto Ramírez.
Por último, la periodista de Quadratín Guerrero, Karla Galarce Sosa, se refirió a la violencia que campea en todos los ámbitos del país y que vulnera a todos, incluidos los periodistas, “a pesar de que Palacio Nacional o las oficinas de gobierno digan lo contrario”, acotó.
En tono discordante con lo argumentado por los periodistas que la precedieron, reclamó garantías “para que los ciudadanos en general gocen del pleno disfrute de sus derechos, entre ellos la libertad de expresión, la libre asociación y hasta la libre empresa, la libre decisión de ocupar la calle, hombres y mujeres, cosa que no existe en México”.
Para aclarar enseguida que “no es que los periodistas requieran de un trato específico o un órgano que vigile sus derechos, se necesita que todos los ciudadanos de México puedan hacer uso de su libre derecho sin ser molestados, hostigados o teman ser extorsionados por poderes de facto”, para lo cual, dijo, no es necesario crear nuevas leyes.
Se puso de lado de los legisladores y recalcó: “coincido con quienes expresan que desde el púlpito presidencial se promueve un discurso vejatorio hacia el gremio periodístico, pues si bien se ha dicho que “no a todos alcanza tal menosprecio”, si nos toca a todos como gremio”, advirtió Galarce Sosa.
Explicó a continuación que la desaparición de empresas periodísticas “y el cobijo gubernamental a los medios ‘independientes´ que se convierten luego en voceros de la oficialidad, ha generado una mayor dificultad de conseguir convenios publicitarios decorosos”.
Para terminar sugirió a los legisladores formular su iniciativa dese una perspectiva de género, porque “nosotras las mujeres seguimos siendo las mayormente vulneradas, ya no solo desde lo familiar, sino desde la vida pública y además, como defensoras de derechos humanos y ejerciendo periodismo”.
Los legisladores y legisladores perredistas reconocieron que en la historia de su partido han sido omisos en los temas tocados por los periodistas y se comprometieron a tomar en cuenta sus participaciones.