El voyerista

Por Alfredo Guzmán

• ¿El salario del miedo?

En este momento en el estado de Guerrero, muchos padres y muchas madres de familia no duermen, despiertan sobresaltados, o entran en angustias severas, luego de que desde la llegada del nuevo gobierno, se ha venido con causa o sin ella, despidiendo personal en todas las dependencias del gobierno estatal y en varios municipios gobernados por el Movimiento de Regeneración Nacional (Morena).
Desconozco si es que hay algún estudio, registro de personal o análisis que establezca la causa y el motivo de cerrar fuentes de trabajo en las áreas de gobierno estatal y en varios municipios.
Y si lo hay, no lo han dado a conocer, al menos públicamente, que establezca la causa y el motivo de los despidos. Quien no trabaja, se entiende que no debe estar ahí.
Cierto es que todo el personal de confianza que laboró en el pasado gobierno estatal y en los municipales, deberán entregar su renuncia respectiva. Aunque es necesario verificar que se les otorgue a los que tengan derecho, según el tiempo y los años laborados, de acuerdo a la ley del trabajo, su respectivo estímulo por dejar de laborar.
Un escándalo que escaló como noticia, fue el enfrentamiento entre la directora de Recursos Humanos de la Fiscalía estatal y la misma Fiscal, quienes se hicieron de palabras, porque la Fiscal determinó enviar a la directora al poblado de Huitzuco, como empleada administrativa.
Derivado del ruido que causó ese evento que tristemente llegó a los golpes, hubo un acuerdo bilateral de que no se iba a despedir personal, salvo el que permite la ley y no se iban a afectar derechos laborales de los trabajadores, Ministerios Públicos, agentes y personal administrativo.
Es costumbre que cada cambio de administración, los que llegan, lo hacen sobrados, soberbios, déspotas y hasta groseros, con el personal que ahí labora, sobre todo cuando el cambio de administración es también de una nueva filiación política.
Ha sido común que cada gobierno lleva a su personal de confianza y en ocasiones los basifican o les dan nombramientos que indica que crean derechos y estos deben de respetarse.
Un caso más es el que ocurre en el municipio de Chilpancingo, donde la Secretaria General, quien en otro momento se distinguió y hasta se hizo identificar por defender los derechos de las mujeres y es la fecha que varias de ellas, se encuentran en paro, reclamando respeto a su derecho laboral, creado con años laborales, y que ahora con una total falta de respeto a los derechos humanos, los quieren cesar.
Lo real, es que el nuevo gobierno tanto estatal como municipales, tienen compromisos y buscan cumplir con ellos y quieren meter a laborar a sus amigos, parientes y compadres, bueno hasta a los y las amantes, pero no debe ser a costa de los trabajadores y trabajadoras de base que tienen derechos que deben ser respetados.
Si hay exceso de personal, se debe de observar por medio de un estudio. Si la gente no tiene el perfil, deberá discutirse su ubicación y si no quiere aceptarlo, se puede conciliar.
Derivado de los cambios de administración en los municipios, cada 3 años y en el gobierno del estado cada 6, hay grandes deudas por liquidar, luego de que los que llegaron, los despidieron y una mala defensa laboral por los funcionarios y una buena defensa por el trabajador, muchos municipios se encuentran ahogados en deudas y no pueden pagar la indemnización a quienes despidieron violentando derechos de antigüedad y laborales.
Lo anterior ha sido la comidilla desde que llegó el nuevo gobierno de Evelyn Salgado Pineda y de varios municipios, como Chilpancingo y Acapulco, principalmente, donde los reclamos se han hecho públicos desde el inicio del año, hasta la fecha.
No hay día que no haya trabajadores, que fueron amagados con despedirlos o a quienes de plano fueron cesados, sin establecer siquiera una plática que indique que les van a pagar su liquidación conforma a derecho y dejan que los juicios se alarguen, para obligar al trabajador a renunciar a sus derechos y aceptar liquidaciones de hambre.
El mismo caso ocurre en la Comisión Estatal de los Derechos Humanos donde la afectación a derechos laborales creados con el tiempo, hoy son pisoteados por la nueva titular y su esposo. Donde no se respetan los mecanismos de ingreso e idoneidad establecidos en las normas del organismo autónomo, ni son del conocimiento del Consejo Técnico, del Consejo Consultivo y de la Consejera Consultiva, como lo indica la norma.
Si esto ocurre en la COEDEHUM, qué no va a pasar en las diferentes áreas administrativas del gobierno del estado y en los municipios.
Pero lamentablemente, estos hechos impactan contra la nueva gobernadora, Evelyn Salgado Pineda, quien pudiera no tener conocimiento, pero si lo tiene, juega con fuego, luego de que los conflictos suben de tono a diario y pudiera generar más inestabilidad, de la ya existente y eso pone en peligro a su gobierno.
La inoperancia política, la falta de pericia y la incapacidad para entender el dolor de quienes pierden su trabajo, puede incendiar la pradera en tiempo de secas.
No hay que prender fuego, donde no lo hay o donde se pone en peligro la estabilidad de su propio gobierno.
Al tiempo.