Francisca Santiaguez

Chilpancingo, Gro., 14 Nov.- El dirigente de la Liga de Comunidades Agrarias y Sindicatos Campesinos Evencio Romero Sotelo informó, que las autoridades agrarias del Gobierno Federal no han integrado el censo de afectaciones agrícolas y agropecuarias de 25 ejidos de los municipios de Acapulco y Coyuca de Benítez, tras el paso del huracán Otis.

En entrevista calificó como “criminal” la indiferencia por parte de las autoridades del ámbito federal, en no considerar los daños en los cultivos de mango, limón, coco y de maíz, en las decenas de localidades rurales.

Lo anterior, recordó, pese a que la federación autorizó ya un presupuesto por 299 millones de pesos, específicamente para la zona rural de los municipios afectados, sin embargo, lo preocupante es que no se esté integrando un censo, como en el caso de daños en viviendas y enseres domésticos.

“Los productores se quedaron completamente en el abandono, lo más grave es que no tienen ni siquiera agua, ni luz eléctrica, sus caminos está incomunicados, hay mucha gente enferma que no tiene medicina, ni forma de cómo trasladarse a comprarla hasta San Marcos al doble de precio, en mucho de los casos“.

Romero Sotelo estimó que por lo menos 100 mil campesinos perdieron la totalidad de sus cosechas a consecuencia del huracán Otis, y quienes hoy no han recibido ninguna atención por parte de las autoridades gubernamentales.

A la par dijo, hay mil 500 personas que viven de la pesca, ellos perdieron todos sus instrumentos de trabajo, como las pequeñas “lanchas o cayucos”, cuyo motor supera un costo de 300 mil pesos; otros más perdieron ganado.

“Perdieron todo, la gente duerme a la intemperie en las hamacas o donde puede, porque se quedaron sin techo; nadie ha acudido a ofrecerles ayuda, por eso hacen un llamado urgente, para que los volteen a ver”, pidió.