Ciudad de México, 23 de mayo de 2023.- Tras la revelación de que el subsecretario de Derechos Humanos de México, Alejandro Encinas, fue objeto de espionaje utilizando el software Pegasus de la empresa israelí NSO, el presidente Andrés Manuel López Obrador afirmó desconocer la identidad de los responsables de dicha acción, pero descartó que la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) estuviera involucrada.

Enfatizó en que no se debe otorgar importancia a este tipo de asuntos, reafirmando que su gobierno no espía a ninguna persona.

Después de que el diario estadounidense The New York Times afirmara que Encinas fue espiado mientras investigaba abusos cometidos por las fuerzas armadas, el presidente reveló que había discutido el tema con el funcionario federal.

“Le dije que no le diera importancia porque no había ninguna intención de espiar a nadie”, agregó.

Durante su conferencia de prensa matutina, se le preguntó si Encinas había sido espiado, a lo que respondió: “No sé”.

Cuando se le consultó acerca de los comentarios de Encinas al respecto, mencionó:

“Él dijo que le habían preguntado si estaba siendo espiado por el New York Times, y él respondió que probablemente sí, solo eso. Y respecto a quién lo hacía, si antes todos espiaban y siguen espiando, de dónde salen las guacamayas”.

En relación al hackeo sufrido por la Sedena, señaló que esto benefició al empresario Claudio X González, y cuestionó quién estaba financiando esas acciones, si mexicanos o extranjeros.

“Entonces, no hay que darle importancia a eso. Lo que debemos tener muy claro es que no se debe espiar a nadie. Eso se hacía antes en la época de García Luna, cuando ni el New York Times, ni el Washington Post, ni el Wall Street Journal decían nada, y los medios en México menos”.

Cuando se le insistió sobre si se sabía si el espionaje se realizó mediante el uso de Pegasus, respondió: “No”.

Al preguntarle si se llevaría a cabo una investigación al respecto, afirmó: “No, porque nosotros no espiamos”.

Ante la pregunta de si estaba seguro de que la Sedena no estuvo involucrada, respondió: “No lo fueron, y nosotros no espiamos. No somos iguales, no torturamos, y en este gobierno no hay masacres como antes, se respetan los derechos humanos”.

Además, recordó que en dos ocasiones había presentado informes sobre sus actividades cuando era director del Instituto Indigenista en Tabasco en 1979. También mencionó que frente a su casa en Villahermosa, había un automóvil utilizado por los encargados del espionaje.

El presidente enfatizó que estas acciones se repitieron “incluso durante las elecciones pasadas, hay pruebas de que espiaban a toda la familia, y siguen haciéndolo, pero nuestros adversarios son muy hipócritas”.