Acapulco, Guerrero 10 de abril de 2024.- El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Guerrero realizó una jornada de cirugía de prótesis de rodilla en 20 pacientes, que lograrán mejorar su calidad de vida.

En un esfuerzo coordinado, médicos especialistas del Hospital General de Zona con Unidad de Medicina Familiar (HGZ/UMF) No. 8, en Zihuatanejo, y del Hospital General de Zona (HGZ) No. 4, en Iguala, realizaron el 5 y 6 de abril, estas exitosas intervenciones quirúrgicas.

Las cirugías fueron realizadas en la unidad médica de Zihuatanejo, con la participación de médicos de los servicios de Traumatología y Ortopedia, Cirugía General, así como personal de Anestesiología, Enfermería, entre otros.

¿Cómo es una cirugía de prótesis de rodilla?

Una cirugía de prótesis de rodilla, también conocida como artroplastia de rodilla, es un procedimiento quirúrgico que se realiza para reemplazar las superficies dañadas o desgastadas de la articulación de la rodilla. Este tipo de cirugía se recomienda generalmente para personas con dolor severo, rigidez y movilidad limitada en la rodilla, causados por artritis o lesiones. Aquí te describo cómo suele ser el proceso:

Antes de la cirugía

• Evaluación médica: El paciente se somete a una evaluación completa, que incluye exámenes físicos, estudios de imagen como rayos X o resonancias magnéticas, y pruebas de laboratorio para asegurar que es un buen candidato para la cirugía.
• Preparación: Se dan instrucciones sobre la medicación que debe o no debe tomarse antes de la cirugía. También se recomienda dejar de fumar y, en algunos casos, perder peso para mejorar los resultados postoperatorios.

Durante la cirugía

• Anestesia: La cirugía se realiza bajo anestesia general (el paciente está completamente dormido) o anestesia regional (anestesia epidural o raquídea, donde el paciente permanece despierto, pero no siente dolor de la cintura para abajo).
• El procedimiento: El cirujano hace una incisión en la rodilla para exponer la articulación. Luego, se retiran las superficies dañadas del fémur (hueso del muslo) y la tibia (hueso de la espinilla). La superficie del fémur se reemplaza con una pieza de metal, y la superficie de la tibia con una pieza de metal y plástico. Si es necesario, la parte de atrás de la rótula también puede ser reemplazada. El objetivo es crear una superficie lisa que permita mover la rodilla de manera fluida.
• Cierre de la incisión: Una vez que las nuevas superficies están en su lugar, el cirujano cierra la incisión con suturas o grapas.

Después de la cirugía

• Recuperación inmediata: El paciente es llevado a una sala de recuperación donde se monitorizan sus signos vitales. Es común sentir dolor en la zona, pero se administran medicamentos para controlarlo.
• Rehabilitación: La fisioterapia comienza poco después de la cirugía para ayudar al paciente a recuperar la movilidad y la fuerza en la rodilla. La rehabilitación es una parte crucial del proceso de recuperación y puede durar varias semanas o meses.
• Cuidados en casa: Se dan instrucciones específicas sobre cómo cuidar la incisión, reconocer signos de complicaciones y continuar con ejercicios de rehabilitación en casa.

Resultados y recuperación

La mayoría de los pacientes experimenta una mejora significativa en el dolor y la movilidad de la rodilla después de la cirugía. Sin embargo, es importante tener expectativas realistas y entender que la recuperación completa puede llevar tiempo. La durabilidad de una prótesis de rodilla varía, pero muchas duran 15 años o más, dependiendo del uso y otros factores individuales.