Estados Unidos lanzó ataques aéreos en Yemen contra objetivos de los rebeldes hutíes. Así, el gigante de occidente intensificó el conflicto con el grupo que ha interrumpido la navegación comercial en el Mar Rojo. El epicentro del conflicto es la Franja de Gaza y se teme una expansión regional.

Joe Biden, presidente estadounidense, confirmó el ataque e informó que la maniobra “exitosa” contó con el respaldo de 10 países, entre ellos Reino Unido. El demócrata, dijo que es una muestra de su política de cero tolerancia a las ofensivas de los rebeldes.

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Los hutíes controla el 30 por ciento del territorio de Yemen, donde impusieron un régimen fundamentalista y represor, acusado de graves violaciones de derechos humanos. El movimiento fue fundado en los años noventa, y su origen fue un grupúsculo religioso, Juventud Creyente. Estos aspiraban a reavivar la rama del islam chií conocida como zaidismo.

Siendo simpatizantes de Irán, el 31 de octubre de 2023, la milicia hutí anunció la apertura de un tercer frente contra Israel. Así, el Estado judío enfrentaba a Gaza y al partido-milicial chií en Líbano, Hezbolá.

Como parte de su lucha, los hutíes consideran a los israelís como el enemigo del islam y de los musulmanes, por lo cual tienden a atacar las navegaciones en el Mar Rojo. Si bien, los rebeldes yemeníes no cuentan con servicios de inteligencia que detecten los barcos y conocer su origen y destino, se cree que Teherán les proporciona los datos.

Entonces, ¿por qué Estados Unidos atacó?

Durante meses, Estados Unidos se había mostrado ambiguo a la hora de atacar posiciones en Yemen por dos factores. El primero, el miedo a un contagio regional de la guerra en Gaza, pues esta milicia tiene el apoyo de Irán. La otra razón es que el aliado de Washington, Arabia Saudí, aspira a salir de su implicación en la guerra de Yemen, y los ataques podrían alejar el alto al fuego definitivo.

Por su parte, la Casa Blanca dijo el 12 de enero de 2024, “Estos ataques representan una amenaza para la seguridad de las fuerzas y los buques comerciales de los Estados Unidos y sus tripulaciones, la estabilidad política y económica regional y los derechos y libertades de navegación”.

Esto como un informe al Congreso por parte de Joe Biden. Advirtió que está dispuesto a tomar medidas adicionales según sea necesario y apropiado para confrontar amenazas o ataques.

Pero la creciente agresividad de los rebeldes y el aumento de sus ataques con los barcos comerciales que se dirigen al canal de Suez, dio como resultado la respuesta militar estadounidense. Así, Estados Unidos no solamente busca mandar un mensaje a los guerrilleros hutíes, sino también a Teherán.