Multimillonarios rusos buscan poner a salvo sus superyates

Nueva York, 5 de marzo de 2022.- Una flota de superyates propiedad de oligarcas rusos está buscando un refugio seguro, una huida desesperada que se produce en medio de una extraordinaria presión mundial para confiscar y exprimir los activos de los propietarios tras la invasión rusa de Ucrania.

Los rusos poseen hasta el 10 por ciento de la flota mundial de megayates, según SuperYachtNews, pues los millonarios rusos son especialmente aficionados a las embarcaciones de exhibición, con comodidades extravagantes como submarinos, hangares para helicópteros, cubiertas de observación subacuáticas y tecnología “antiparazzi” para evitar que los pasajeros sean fotografiados.

Francia ha incautado una de estas embarcaciones, y las autoridades italianas han retenido otras dos, mientras que la situación de otro superyate ruso en Alemania está en disputa.

El congresista estadounidense, Don Young presentó el miércoles la Ley de Rendición de Cuentas de los Oligarcas mediante la Confiscación (BOATS), que se centra específicamente en los superyates rusos.

Muchas de las majestuosas embarcaciones se esconden en Maldivas o se dirigen a este país, que no tiene ningún acuerdo de extradición con Estados Unidos.

Los yates rusos se encuentran a menudo en las Seychelles, favorecidas desde hace mucho tiempo como paraíso fiscal internacional para los súper ricos. Según VesselFinder.com, uno de ellos ya está allí y otro está en camino. Se desconoce el destino de otros.

El yate del propio presidente ruso, Vladimir Putin, el Graceful, salió de Hamburgo, Alemania, en vísperas de la invasión de Ucrania.

Su embarcación de lujo fue diseñada en Londres y tiene una valor aproximado de 100 millones de dólares. Se cree que actualmente se encuentra en Kaliningrado, Rusia.