¿Por qué se cree que los famosos fallecen de tres en tres?

Ciudad de México, 22 de febrero de 2025 – En cuestión de días, México se despidió de tres figuras emblemáticas del espectáculo: Paquita la del Barrio, Yolanda Montes “Tongolele” y Daniel Bisogno. Sus fallecimientos, ocurridos en un corto lapso, han avivado en redes sociales el viejo mito de que las celebridades mueren en grupos de tres.

La primera en partir fue Paquita la del Barrio, el pasado 17 de febrero. Ese mismo día, se dio a conocer el fallecimiento de Tongolele, la icónica vedette y bailarina. Finalmente, el conductor Daniel Bisogno, conocido como “El Muñeco”, murió el 20 de febrero.

Ante esta coincidencia, muchos usuarios en redes sociales retomaron la teoría de la “regla de tres”, una creencia popular que sostiene que cuando una figura pública muere, pronto le seguirán dos más.

¿De dónde surge la creencia?

El mito de que los famosos fallecen en grupos de tres no es nuevo y ha surgido en distintos momentos de la historia del espectáculo. Uno de los primeros casos documentados se remonta a 1959, cuando los músicos Buddy Holly, Ritchie Valens y The Big Bopper murieron juntos en un accidente aéreo. El trágico suceso fue conocido como “el día que murió la música”, lo que dio pie a la idea de que las celebridades podrían partir en “trilogías fúnebres”.

Desde entonces, varias coincidencias han reforzado esta percepción:

• 2009: Fallecieron Michael Jackson, Farrah Fawcett y Ed McMahon en un corto período de tiempo.
• 2016: Se despidieron David Bowie, Alan Rickman y Prince, avivando nuevamente la creencia.
• 2023: En México, el espectáculo perdió a Rebecca Jones, Irma Serrano e Ignacio López Tarso, también en el mismo mes.

Ahora, con la muerte de Paquita la del Barrio, Tongolele y Bisogno, la teoría de la “regla de tres” resurge, dividiendo opiniones entre quienes la consideran una simple coincidencia y quienes creen en patrones misteriosos.

¿Coincidencia o patrón?

Expertos y escépticos suelen atribuir este fenómeno a la tendencia humana de buscar patrones en los eventos, un sesgo cognitivo que nos lleva a conectar sucesos que, en realidad, pueden no tener relación alguna.

Si bien no existe evidencia científica que respalde esta teoría, el mito sigue vivo en la cultura popular y cada vez que mueren figuras reconocidas en lapsos cortos, la regla de tres vuelve a tomar fuerza.