Hacer ejercicio, ¿cómo pasar del propósito de Año Nuevo a parte de nuestra rutina?
Se trata de un propósito de Año Nuevo popular para muchas personas, pero también uno de los más fallidos.
Ciudad de México, 31 de diciembre de 2022.- Hacer ejercicio es un propósito de Año Nuevo común para muchas personas, como una forma de mejorar su salud y bienestar.
El comienzo de un nuevo año es una oportunidad perfecta para comenzar a trabajar en sus metas de entrenamiento; además, hacer ejercicio puede ser una forma de reducir el estrés y mejorar el bienestar mental.
Sin embargo, puede haber muchas razones por las que una persona pierde la motivación para hacer ejercicio, como el estrés, la falta de tiempo, el aburrimiento con la rutina de ejercicios actual o simplemente no ver resultados rápidos suficientes.
Aquí te ofrecemos algunas recomendaciones para no perder la motivación y convertir al ejercicio en parte de tu rutina diaria, de tal manera que pase de ser un propósito de Año Nuevo a una parte esencial de nuestras vidas.
Establece metas alcanzables
Es importante establecer metas realistas para evitar desanimarse.
Puede ser útil comenzar con poco peso o repeticiones, y luego aumentarlas a medida que progreses.
Encuentra un compañero de entrenamiento
Hacer ejercicio con un amigo o miembro de la familia puede ser muy motivador.
Además, es más difícil rendirse cuando alguien más depende de nosotros para cumplir con nuestras metas de entrenamiento.
Varía tu rutina de ejercicios
A veces, hacer siempre lo mismo puede resultar aburrido.
Trata de variar su rutina de ejercicios, probando nuevos deportes o actividades físicas para mantenerse motivado.
Recompénsate a ti mismo
Premiárse a sí mismo por cumplir con las metas de entrenamiento puede ser algo tan simple como darse un capricho después de una sesión o comprarse un nuevo artículo de ropa deportiva.
No te rindas
A veces, es natural tener altibajos en nuestra motivación para hacer ejercicio. Si te sientes desanimado, recuerda por qué empezaste a hacer ejercicio en primer lugar y trata de volver a enfocarse en tus metas a largo plazo.
También puede ser útil recordar que tomarse un día de descanso o reducir el ritmo de vez en cuando es completamente normal y no significa que se esté fracasando.