Una menor cercana a cumplir 11 años y dedicarse a la docencia cuando fuera mayor fue vendida por 800 pesos a dos adultos en estado de ebriedad en agosto del 2021, quienes abusaron de ella sexualmente reiteradas ocasiones; lo peor de esta atrocidad es que fue su madre fue quien la ofreció y cobró para que esto ocurriera.

La madre decidió que al ser ella una prostituta su hija debería tener el mismo oficio y para generar dinero debería empezar a su corta edad, para conseguirlo sometió a la niña a violencia física y psicológica y durante meses la mantuvo sometida, mientras hombres diferentes entraban a su casa para utilizarla.

Vecinos que se percataron del abuso que sufría la menor pidieron apoyo de las autoridades para rescatarla y poder devolverle la posibilidad de tener un futuro sin violencia.

Ante las autoridades la niña relató que en agosto y septiembre del 2021 escuchó a su madre cuándo negoció con sus victimarios un pago de 800 pesos por tener un encuentro sexual con ella.

Tras la intervención de la Fiscalía General del Estado, la menor fue rescatada y resguardada en una casa hogar, donde recibe tratamiento médico y psicológico, además se le apoya para recuperar sus estudios, para que pueda retomar su sueño de ser maestra.

Su madre fue detenida y procesada por el delito de trata de personas en la modalidad de prostitución ajena en menor de edad con violencia física y moral por parentesco con consanguinidad.

Las agravantes del caso derivaron en que el juez dictara la sentencia máxima que se puede dar por este delito, 40 años de prisión en los que la mujer además pierde los derechos políticos y la tutela de la niña que se mantendrá a cargo del estado al menos hasta su mayoría de edad.

“La FGE Guerrero a través de la Fiscalía Especializada para la Investigación de Delitos Sexuales y Violencia Familiar, logró establecer la participación de la sentenciada en los hechos, en seguimiento a una intensiva investigación que permitió recabar pruebas contundentes presentadas ante la Juez”, señaló la Fiscalía al dar a conocer como un logro que la mujer haya sido sentenciada.