Luego de que en las últimas semanas se registraran un par de sismos en Guerrero, con epicentros en los municipios costeros como Coyuca de Benítez o Acapulco, diversos usuarios de redes sociales han reportado “estruendos”.

Ante esta situación, la incertidumbre aumentó debido a la alerta del Mar de Fondo en las playas del Pacífico, pues hasta los lugareños (sobre todo en la Costa Chica) se sorprendieron por la fuerza de las olas impactando en la franja de arena.

Pese a que los estruendos probablemente pueden ocasionar mucho miedo, científicos coinciden en que ese ruido en específco, se debe a que lo asociamos por los movimientos telúricos… donde normalmente los identificamos.

¿Qué son esos estruendos?

Estos estruendos o “retumbidos” no son exclusivos de las cosas mexicanas. Se han reportado en Puebla, Morelos e incluso en Reino Unido y hasta en Nueva York.

Los sismólogos aseguran que estos ruidos no son un fenómeno aislado y que “no vienen del cielo” o explosiones, sino que forman parte de la dinámica de los movimientos telúricos. Al igual que las luces que algunos reportan ver durante un sismo, los estruendos y sonidos inusuales son fenómenos que pueden acompañar o NO a los temblores.

• Te puede interesar: A 115 años del terremoto y tsunami que devastó Acapulco

Los sonidos durante un sismo pueden variar desde crujidos y chirridos hasta estruendos y retumbos sordos. La percepción de estos ruidos depende de varios factores, como la ubicación del observador, la intensidad del sismo y las características geológicas del área afectada.

Entre las explicaciones más aceptadas para estos ruidos se encuentran:

1. Fracturación de rocas: La liberación repentina de energía puede fracturar rocas, generando sonidos audibles.
2. Deslizamiento de suelos: El movimiento del suelo durante un sismo puede provocar deslizamientos de partículas que producen ruidos.
3. Compresión y liberación de gases: La compresión y liberación rápida de gases atrapados en el suelo también puede causar sonidos.

A pesar de que no todos los sismos están acompañados de sonidos inquietantes o luces en el cielo, los especialistas continúan investigando estos fenómenos para comprender mejor sus causas.

David Hill, científico del Servicio Geológico de Estados Unidos, sugiere que en regiones costeras, los estruendos pueden ser causados por olas golpeando acantilados o por el metano liberado por cristales en el fondo del océano.

Este gas, al combustionar, podría generar grandes estruendos.

De hecho escucharon la Tierra

Geólogos del MIT (Instituto Tecnológico de Massachusetts) en el 2023 descubrieron que los sonidos que se registran en el subsuelo, serían realmente huellas dactilares de la estabilidad de las rocas.

La interpretación de los expertos es que estas fisuras, poros y defectos que tienen las rocas, serían cuerdas que resuenan cuando se presionan y se tensan. Los sonidos pueden tienen información que puede ser muy interesante, ya que pueden decir algo sobre la profundidad y la fuerza de las rocas.