Acapulco, Gro., 31 de octubre del 2023.- A la media noche del pasado 24 de octubre, el Huracán Otis ingresó al puerto de Acapulco y sus intensos vientos de más de 300 kilómetros por hora provocaron severos daños en el puerto, además de decenas de víctimas y personas desaparecidas.

Ahora, familiares de personas desaparecidas intentan desesperadamente encontrar a sus desaparecidos en hospitales, Ministerios Públicos e incluso en el Servicio Médico Forense del municipio.

Uno de esos casos es el de Abigail, quien está desaparecida desde el miércoles y que se comunicó con su pareja por última vez a través de un video en el que le pidió que cuidara a sus hijas.

La familia de Abigaíl, como la de muchos marineros (datos extraoficiales hablan de al menos 84 desaparecidos) intentan encontrarla en diferentes lugares, pero ninguna autoridad les da respuesta.

“En el Semefo no nos dicen cuántas mujeres hay, si alguna coincide con las características de mi hermana; no nos quieren dar ninguna información, supuestamente hasta que tengan todos los cuerpos para sacarle fotos y trabajar cuerpo por cuerpo”, declaró para El Financiero Jazmín Andrade Rodríguez, hermana de Abigail.

Explicó que sólo “nos piden datos del desaparecido y muestra de sangre de un familiar directo, que lo van a analizar y nos avisan. Yo voy a seguir luchando para encontrar a mi hermana, sea lo que sea, sea que me canse, que camine todo, yo la voy a encontrar”, advirtió en medio del llanto de dolor.

Con ella hay cuatro personas desaparecidas (el capitán, Ulises, Parra y Alejandro), todos tripulantes de la embarcación Litos, la cual también está desaparecida.

El caso del Pedro Espinosa, otro marinero desaparecido

Pedro Espinosa salió de su casa el martes, apenas unas horas antes de que la fuerza de Otis golpeara con mayor intensidad.

Él es capitán del yate Tiger y como tal, sabía de la obligación de resguardar la nave ante el mal tiempo, así que eso hizo junto con su marinero, Eduardo Rosales.

Él me dijo que tenía que ir a ver lo del yate, que lo iba a pasar a la Marina, donde se supone que están mejor resguardadas. El último mensaje que me mandó dice: ‘vamos a salir de ésta, mi amor, nos vemos mañana. Cuida a las niñas. Las amo”, dijo Karen Piedra, esposa de Pedro.

Él no aparece y Eduardo sobrevivió tras pasar seis horas a la deriva luchando con los fuertes vientos y olas de hasta 10 metros, según narró él mismo a este diario.

Como en el caso e Abigaíl, la esposa de Pedro recorrió cualquier cantidad de instituciones, sin recibir respuesta.

“No nos queda otra que seguir buscando hasta el último rincón de Acapulco”, indicó la mujer.